jueves, 8 de noviembre de 2012

CUANDO LA VERDAD NO ES VERDAD YA NO NOS ASOMBRA NADA...

Me contaron que había una señorita virgen que tenía miedo a ser desflorada; y cuando una tarde otoñal me la presentaron en una función de teatro nos hicimos amigos.

Recuerdo que yo estaba interesado, como escribidor,  por saber ese temor que se había vuelto legendario entre sus amigos y familiares; y que por supuesto, ya se había vuelto  murmullo  nacional e internacional.

Dejé que ella deslizara la conversación, y una mañana de inverno mientras paseábamos por el puente de los suspiros, en el Distrito de Barranco, en la ciudad de Lima, Perú, me contó su verdad:

_La verdad -me dijo- amo el amor pero amo más el sexo. Me encanta desde chiquita, desde que mis primos mayores me cargaban y me acariciaban con sus dedos todo mi cuerpo.

Cuando tenía 10 años mis primos, pues yo era hija única, hacían sexo con sus enamoradas: era natural verlos agonizar de placer, cuando ningún adulto estaba en casa.

Claro que en esos años solamente me gustaba verlos cómo las hacían aullar de placer a sus enamoradas y pude ser una gran voyeurista, pero  quise pasar a la acción así que una noche me metí a la cama de mi primo preferido y al ver mi intención me dijo al oído:

_Ahora vas aprender lo que es rico. Y me bajó mis prendas, me puso el culito a la altura de su lengua y la metió suavemente dentro de mí,  haciéndome sentir cosas inenarrables que desde luego gocé ese instante  y todas las noches de mi vida hasta ahora que tengo casi 40 años.

_Pero y en cuanto al sexo en sí le -pregunté-.

Mira me dijo desde muy chica mi primos me enseñaron que solamente por el ano había que gozar para no tener problemas con la familia. Así que mis siete primos me penetraron por atrás hasta hacerme una experta.

Y así fue que le tuve terror a ser desflorada hasta ahora. Quiero permanecer virgen hasta encontrar a la persona adecuada... pero ya ves no la encuentro. Ojalá cuando escribas lo que te he contado seas fiel a lo que te he dicho. Así me dijo y  se fue contorneándose con su hermoso trasero moldeado por las manos de los primos, amigos y desconocidos que hicieron lo que ella tiene ahorita:_ UN HERMOSÍSIMO CULO.